Hola familia!
A veces los locutores nos quemamos de dar tanta información y nos gustaría que los oientes también participaran con sus comentarios, críticas y opiniones, como venís haciendo dsd el principio del programa. Ahora os proponemos que enviéis esas bromas memorables que flotan a diario en vuestros vestuarios, y que en vuestras quedadas extradeportivas acostrumbráis a sacar. Llevaréis años y años compartiendo la pasión por el deporte y tendréis recuerdos humorísticos para dar y regalar. Vamos a hacer un archivo. Ya se sabe, si no se recogen por escrito, al final se olvidan y se pierden en el tiempo!
Adelante!! Dejadme que sea yo quien rompa el hielo:
EQUIPO: Alzamora C.F.
SITUACIÓN: Vestuario antes del entreno
HISTORIETA: El primer entrenador, Pepe, había llegado tarde a cambiarse y los jugadores ya estabamos preparados para empezar el entreno. Pepe, viendo que le esperábamos a él, y para no perder más tiempo, dijo al segundo entrenador:
- Miguel, sácalos pal campo.
Y yo, el capitán del equipo, pensé en voz alta y solté:
- Joder, ni que fuéramos ganado.
Los compañeros se partieron de la risa, al mismo tiempo que me miraban con cara de asombro por mi atrevimiento. Debo recordar que Pepe era un míster muy severo y con bastante mala hostia. Me hizo dar vueltas al campo hasta terminar la hora y media de entrenamiento. Pero, como dice un colega cuando la broma es peligrosa / desafiante: "tío, te la has jugado de triple". Aún hoy lo recuerdo y me parto de la risa.
EQUIPO: Alzamora C.F.
SITUACIÓN: Antes de empezar el partido que decidía si subíamos de Segunda a Primera
HISTORIETA: Nos viene el coordinador del club, un hombre joven de gafas y pelo largo, y nos comunica, que en nombre del presidente, estaremos invitados a "un bocata y a un bocadillo" si ganamos el partido. No recuerdo si conseguimos o no la victoria, pero el misterio de qué diferencia hay entre un bocata y un bocadillo aún me persigue en mis pesadillas.
EQUIPO: Alzamora C.F.
SITUACIÓN: Vestuario, momentos antes del partido
HISTORIETA: Nuestro entrenador, el Pepe, solía darnos la brasa antes de saltar al campo, con las fórmulas de siempre: "el partido de hoy es importantísimo, por la sencilla razón de que..", y luego pasaba de un jugador a otro, poniéndose a un palmo de la cara y mirando a cada chaval fijamente a los ojos. Al final todos éramos claves para el equipo, y teníamos que darlo todo ahi fuera, como si fuera un campo de batalla y nos jugaramos la vida. Cuando llegaba a mi posición, se ponía muy serio y cargaba sobre mí. Yo le miraba con la cara del Boina Verde del Commandos (mandíbula apretada y ojos de rabia) y retenía sus órdenes. Los compañeros siempre me decían que ponía cara de asesino. Después, si perdíamos el partido, nos sometía a "los cuadrados", la peor forma de tortura inventada por una mente humana: consistía en un circuito de conos en forma de cuadrado en los que había que seguir una pauta de carrera, de uno a otro sprint, de este al siguiente de espaldas, al otro con zancadas, y así en tandas de varios minutos. Acabamos todos como toros, pero anda que no nos machacaban los cuadrados.
Firmado: el cap buit del Triniteam = Borjª·
jueves, 9 de abril de 2009
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